viernes, 31 de mayo de 2013

TRISQUEL FLAMENCO EN EL TEATRO ALHAMBRA (29/05/2013)

Sobre la base musical del romance el espectáculo es un aparente juego a tres proyectado por tres actores principales en los que el argumento es el flamenco en toda su extensión. Trisquel Flamenco abarca desde la raíz misma del cante en la voz de Antonio Campos, pasando por el baile poliédrico del reciente ganador Premio Max Manuel Liñán hasta la innovación a través de las nuevas tendencias musicales desarrolladas por las manos de Pablo Suárez. El camino del flamenco ha sido eso. Desde su génesis cantaora, hasta la danza en toda su extensión finalizando en vanguardia. En resumen, Trisquel flamenco. Cante, baile y toque. 
El trio artístico reunió a  la mayor cantidad de aficionados cabales que he visto en mucho tiempo en la ciudad. Acostumbrados a ver los teatros medio vacíos y/o acogiendo a turistas, los dos granadinos y el pianista consiguieron reunir a toda una pléyade de conocidos en el flamenco granadino. Sólo por esto ya merece haber ido al teatro. El Alhambra llegó a media entrada, quizás algo menos para disfrutar de esta idea salida de la cabeza de Antonio Campos. Un explorador del flamenco que convierte en grande todo aquello que crea. Probablemente tanto Manuel en su especialidad como Antonio sean de lo mejor que hay en Granada, cada uno en su disciplina. Y si se suman para dar cuerpo a una historia simple, libre de efectismo y flamenca en esencia, el resultado no puede ser distinto al sobresaliente. 
La trama no es otra que el cante por zambras, milongas, recitado de poema (Jose Heredia Maya) bamberas o romances en la voz de Campos, el baile de Liñán ya fuere solo, con piano, con voz o con los dos y el piano de Suárez por granainas, romance o lo que le echen.  
Tres disciplinas unidas, viajando en el sonido, dibujando el tiempo y sonando imágenes. Puedan parecer extrañas estas palabras pero traducen el resultado de este 'Trisquel'. 
Manuel Liñán es la evolución del flamenco granadino. Desde hace años avanza en la investigación de nuevas formas, de nuevos formatos que llevar al escenario sin parecerse a nadie, alejado de copismos pero teniendo siempre presente a sus maestros. La evolución de su trayectoria se refleja no ya sólo en la obtención del premio Max, más que merecido, sino que supone un disfrute personal verlo por el escenario, Juega con el cuerpo, a veces sus movimientos son sugerentes, picarones que se vuelven flamenquísimos o se adentra en los conceptos de la danza propiamente dicha. 









domingo, 26 de mayo de 2013

GRABACIONES DE FRASQUITO YERBABUENA JR

 Como ya saben los aficionados al flamenco en general y al flamenco granadino, Frasquito Yerbabuena no llegó a grabar nunca. Es una lástima pues si hubiese grabado podríamos saber desde como cantaba hasta los matices que otorgaba al fandango del Albaicín que lleva su nombre, o al menos que se le atribuye, a sabiendas de que no fue creación personal. 


Este comercial de vinos y licores dejó cierta herencia flamenca en su familia. Desde su hijo, cantaor y tocaor aficionado hasta su nieto Jose Luís. Éste es músico autodidacta aunque con conocimientos de armonía, contrapunto guitarra etc. 
Durante muchos años ha impartido clases privadas en Granada, Almería, Sevilla etc. 
Pero hoy no vengo a hablarles de su nieto, sino de su hijo. ¿Cantaría igual que su padre? Nunca lo sabremos pero hoy les traigo unos cantes de Frasquito Yerbabuena. Aunque del hijo: Francisco Gálvez Zarza.
A pesar de ser una grabación casera la calidad es más que aceptable y se pueden apreciar los matices de los cantes. 
En 1981, hubo una reunión de aficionados en casa de Alonso Cano a la que acudieron entre otros Manuel Benítez Carrasco, Manuel Cano y Emilia Onofre, Rafael Piñar y otros aficionados. 
En la misma hubo recital de poesía, recital de toque de las manos del gran Manuel Cano y cantes tanto de Emilia como de Frasquito ya en edad muy avanzada.

 Frasquito Yerbabuena Jr interpretando el FANDANGO DEL ALBAICÍN

 Frasquito Yerbabuena Jr interpretando CANTES DE SOLEÁ



viernes, 24 de mayo de 2013

LOS CAMINOS DEL CANTE DE JOSE CEPERO

Este lunes pasado tuvimos la oportunidad de retornar a nuestro pasado jerezano y volver a la tertulia de 'Los caminos del cante' que dirige Jose Maria Castaño. Gracias a nuestro amigo Jose Manuel Martín Barbadillo, que propuso el tema de esta semana, tuvimos el honor de aportar algunos datos sobre el cantaor Jose Cepero. Tras cuatro años colaborando y participando en la tertulia radiofónica jerezana agradecemos desde Granadaiflamenco que contara con nosotros para participar.
 Desde aquí enviamos un abrazo a nuestros compañeros Alfredo Benitez, Estela Zatania, Diego Alba y Villagrán, Antonio García 'El Platero' y Juan Maria de los Rios, además de a Barbadillo y Pepe Castaño. 
Os dejo un enlace de la tertulia dedicada al jerezano Jose Cepero y dos fotos de la copa de oro Chacón que ganara el cantaor en 1928 en el teatro Zarzuela de Madrid. En la primera de ellas podéis observar el estado actual de dicha copa, y en la posterior al cantaor con el trofeo. 



Copa de Oro Chacón en su estado actual (2013)


 Foto originalo del fotógrafo Luque con Jose Cepero junto a la Copa (1928)


miércoles, 22 de mayo de 2013

TRISQUEL FLAMENCO

Numerosos medios de comunicación se hicieron eco hace unos días del premio Max al mejor intérprete de danza otorgado al bailaor granadino Manuel Liñán. 
Si hace apenas dos semanas lo pudimos ver en solitario en el teatro Alhambra dentro del ciclo 'Flamenco viene del Sur' tenemos la suerte de volver a disfrutar de su arte el próximo 29 de mayo en el mismo lugar. 
Esta vez no vendrá en solitario. Aunque en la parte danzística si, el resto del elenco es igual de importante que el bailaor aún sin haber ganado un premio de estas características. Esto es así pues la propuesta que presentarán el próximo miércoles es muy conceptual. Piano, cante y baile. Sin aderezos, sin escenografía, sin otra música que el piano que posee en la garganta Antonio Campos y las manos cantaoras de Pablo Suárez amén de la danza de Liñán. 

"Trisquel Flamenco es la unión de Tres formas de expresión Cante, Piano y Baile que se unen en un símbolo geométrico y curvilíneo formado por una hélice de tres brazos en espiral que se unen en un punto central el Flamenco girando alrededor de este al estilo de los símbolos solares.
Trisquel Flamenco representa la evolución y el crecimiento. Representa el equilibrio entre cuerpo, mente y espíritu. Manifiesta el principio y el fin, la eterna evolución y el aprendizaje perpetuo. Pasado, Presente y Futuro".

Para los aficionados este es un espectáculo cuyo estreno se produjo en Granada en la muestra flamenca 'Los Veranos del Corral' del año pasado siendo un rotundo éxito. 
 
Tres mentes que componen sonidos, música y lineas en el espacio partiendo del clasicismo más moderno para terminar en la vanguardia jonda del flamenco. 
Para aquellos que puedan les invitamos a acudir al teatro Alhambra el próximo 29 de mayo y disfrutar de estos tres artistas y de uno de los mejores espectáculos flamencos de los últimos años. 


Pincha aquí para ver el VIDEO DE TRISQUEL FLAMENCO












miércoles, 15 de mayo de 2013

LUCÍA GUARNIDO SUMA Y SIGUE

La bailaora granadina afincada en Madrid Lucía Guarnido vuelve a su tierra para presentar su último espectáculo 'Suma y sigue'. Aunque ya lo había estrenado en Salobreña y Motril, lo trae a Granada capital para todos aquellos amantes del baile que quieran disfrutar de su baile. También pudimos ver este en Madrid y Barcelona, pero la suerte ha querido que se lo presente a la ciudad que le dio el bagaje profesional inicial en el baile flamenco. 



Será el próximo 19 de mayo en el teatro Isabel la Católica de Granada a las 20:00 h y contará con la colaboración especial de Adrián Santana. Además contará con la voz de Sergio Gómez 'El Colorao' y Alfredo Tejada, la guitarra de Luís Mariano y la percusión de Miguel Cheyenne.

Les dejo un resumen del espectáculo en el siguiente enlace.





sábado, 11 de mayo de 2013

LA ARQUITECTURA SEGÚN LORCA (II)



Os dejo la continuación de la conferencia de Federico García Lorca en 1922 sobre la 'Arquitectura del cante jondo'.


(...) En España, el cante jondo ha ejercido indudable influencia en todos los músicos, de la que llamo yo «grande cuerda española», es decir desde Albéniz hasta Falla, pasando por Granados. Ya Felipe Pedrell había empleado cantos populares en su magnífica ópera La Celestina (no representada en España, para vergüenza nuestra) y señaló nuestra actual orientación, pero el acierto genial lo tuvo Isaac Albéniz empleando en su obra los fondos líricos del canto andaluz. Años más tarde, Manuel de Falla llena su música de nuestros motivos puros y bellos en su lejana forma espectral. La novísima generación de músicos españoles, como Adolfo Salazar, Roberto Gerhard, Federico Mompou y nuestro Ángel Barrios, entusiastas propagadores del proyectado concurso, dirigen actualmente sus espejuelos iluminadores hacia la fuente pura y renovadora del cante jondo y los deliciosos cantos granadinos, que podían llamarse castellanos, andaluces. 
Vean ustedes, señores, la trascendencia que tiene el cante jondo y qué acierto tan grande el que tuvo nuestro pueblo al llamarlo así. Es hondo, verdaderamente hondo, más que todos los pozos y todos los mares que rodean el mundo, mucho más hondo que el corazón actual que lo crea y la voz que lo canta, porque es casi infinito. Viene de razas lejanas, atravesando el cementerio de los años y las frondas de los vientos marchitos. Viene del primer llanto y el primer beso. 

Una de las maravillas del cante jondo, aparte de la esencial melódica, consiste en los poemas. 
Todos los poetas que actualmente nos ocupamos, en más o menos escala, en la poda y cuidado del demasiado frondoso árbol lírico que nos dejaron los románticos y los postrománticos, quedamos asombrados ante dichos versos. 
Las más infinitas gradaciones del Dolor y la Pena, puestas al servicio de la expresión más pura y exacta, laten en los tercetos y cuartetos de la siguiriya y sus derivados. 
No hay nada, absolutamente nada, igual en toda España, ni en estilización, ni en ambiente, ni en justeza emocional. 
Las metáforas que pueblan nuestro cancionero andaluz están casi siempre dentro de su órbita; no hay desproporción entre los miembros espirituales de los versos y consiguen adueñarse de nuestro corazón, de una manera definitiva. 
Causa extrañeza y maravilla, cómo el anónimo poeta de pueblo extracta en tres o cuatro versos toda la rara complejidad de los más altos momentos sentimentales en la vida del hombre. Hay coplas en que el temblor lírico llega a un punto donde no pueden llegar sino contadísimos poetas. 

Cerco tiene la luna,
 mi amor ha muerto. 

En estos dos versos populares hay mucho más misterio que en todos los dramas de Maeterlink, misterio sencillo y real, misterio limpio y sano, sin bosques sombríos ni barcos sin timón, el enigma siempre vivo de la muerte. 

Cerco tiene la luna, 
mi amor ha muerto. 

Ya vengan del corazón de la sierra, ya vengan del naranjal sevillano o de las armoniosas costas mediterráneas, las coplas tienen un fondo común: el Amor y la Muerte..., pero un Amor y una Muerte vistos a través de la Sibyla, ese personaje tan oriental, verdadera esfinge de Andalucía. 
En el fondo de todos los poemas late la pregunta, pero la terrible pregunta que no tiene contestación. Nuestro pueblo pone los brazos en cruz mirando a las estrellas y esperará inútilmente la seña salvadora. Es un gesto patético, pero verdadero. El poema o plantea un hondo problema emocional, sin realidad posible, o lo resuelve con la Muerte, que es la pregunta de las preguntas. 
La mayor parte de los poemas de nuestra región (exceptuando muchos nacidos en Sevilla) tienen las características antes citadas. Somos un pueblo triste, un pueblo extático. 
Como Ivan Turgueneff vio a sus paisanos, sangre y médula rusas convertidos en esfinge, así veo yo a muchísimos poemas de nuestra lírica regional. 

¡Oh esfinge de las Andalucías! 
A mi puerta has de llamar, 
no te he de salir a abrir 
y me has de sentir llorar. 

Se esconden los versos detrás del velo impenetrable y se duermen en espera del Edipo que vendrá a descifrarlos para despertar y volver al silencio... 
Una de las características más notables de los textos del cante jondo consiste en la ausencia casi absoluta del «medio tono». 
Tanto en los cantos de Asturias como en los castellanos, catalanes, vascos y gallegos se nota un cierto equilibrio de sentimientos y una ponderación lírica que se presta a expresar humildes estados de ánimo y sentimientos ingenuos, de los que puede decirse que carece casi por completo el andaluz. 
Los andaluces rara vez nos damos cuenta del «medio tono». El andaluz o grita a las estrellas o besa el polvo rojizo de sus caminos. El medio tono no existe para él. Se lo pasa durmiendo. Y cuando por rara excepción lo usa dice: 

A mí se me importa poco 
que un pájaro en la «alamea» 
se pase de un árbol a otro. 

Aunque en este cantar, por su sentimiento aun cuando no por su arquitectura, yo noto una acusada filiación asturiana. Es, pues, el patetismo la característica más fuerte de nuestro cante jondo. 
Por eso, mientras que muchos cantos de nuestra península tienen la facultad de evocarnos los paisajes donde se canta, el cante jondo canta como un ruiseñor sin ojos, canta ciego, y por eso tanto sus textos pasionales como sus melodías antiquísimas tienen su mejor escenario en la noche... en la noche azul de nuestro campo. 
Pero esta facultad de evocación plástica que tienen muchos cantos populares españoles les quita la intimidad y la hondura de que está henchido el cante jondo. 

Hay un canto (entre los mil) en la lírica musical asturiana que es el caso típico de evocación. 

Ay de mí, perdí el camino; 
en esta triste montaña, 
ay de mí, perdí el camino; 
déxame meté l'rebañu 
por Dios en la to cabaña. 
Entre la espesa flubina, 
¡ay de mí, perdí el camino!; 
déxame pasar la noche 
en la cabaña contigo. 
Perdí el camino 
entre la niebla del monte, 
¡ay de mí, perdí el camino!

Es tan maravillosa la evocación de la montaña, con pinares movidos por el viento, es tan exacta la sensación real del camino que sube a las cumbres donde la nieve sueña, es tan verdadera la visión de la niebla, que asciende de los abismos confundiendo a las rocas humedecidas en infinitos tonos de gris, que llega uno a olvidarse del «probe pastor» que como un niño pide albergue a la desconocida pastora del poema. «Llega uno a olvidarse de lo esencial en el poema.» La melodía de este canto ayuda extraordinariamente a la evocación plástica con un ritmo monótono verde-gris de paisaje con nieblas. 
En cambio el cante jondo canta siempre en la noche. No tiene ni mañana ni tarde, ni montañas ni llanos. No tiene más que la noche, una noche ancha y profundamente estrellada. Y le sobra todo lo demás. 
Es un canto sin paisaje y, por lo tanto, concentrado en sí mismo y terrible en medio de la sombra, lanza sus flechas de oro que se clavan en nuestro corazón. En medio de la sombra es como un formidable arquero azul cuya aljaba no se agota jamás. 
Las preguntas que todos hacen de ¿quién hizo esos poemas?, ¿qué poeta anónimo los lanza en el escenario rudo del pueblo?, esto realmente no tiene respuesta. 
Jeanroy, en su libro Orígenes de la lírica popular en Francia, escribe: «El arte popular no sólo es la creación impersonal, vaga e inconsciente, sino la creación "personal" que el pueblo recoge por adaptarse a su sensibilidad.» Jeanroy tiene en parte razón, pero basta tener una poca sensibilidad para advertir dónde está la creación culta, aunque ésta tenga todo el color salvaje que se quiera. 
Nuestro pueblo canta coplas de Melchor del Palau, de Salvador Rueda, de Ventura Ruiz Aguilera, de Manuel Machado y de otros, pero ¡qué diferencia tan notable entre los versos de estos poetas y los que el pueblo crea! ¡La diferenca que hay entre una rosa de papel y otra natural!
Los poetas que hacen cantares populares enturbian las claras linfas del verdadero corazón; y ¡cómo se nota en las coplas el ritmo seguro y feo del hombre que sabe gramáticas! Se debe tomar del pueblo nada más que sus últimas esencias y algún que otro trino colorista, pero nunca querer imitar fielmente sus modulaciones inefables, porque no hacemos otra cosa que enturbiarlas. Sencillamente por educación. 
Los verdaderos poemas del cante jondo no son de nadie, están flotando en el viento como vilanos de oro y cada generación los viste de un color distinto, para abandonarlos a las futuras. 
Los verdaderos poemas del cante jondo están en sustancia, sobre una veleta ideal que cambia de dirección con el aire del Tiempo.



Nacen porque sí, son un árbol más en el paisaje, una fuente más en la alameda. 
La mujer, corazón del mundo y poseedora inmortal de la «rosa, la lira y la ciencia armoniosa», llena los ámbitos sin fin de los poemas. La mujer en el cante jondo se llama Pena... 
Es admirable cómo a través de las construcciones líricas un sentimiento va tomando forma y cómo llega a concrecionarse en una cosa casi material. Este es el caso de la Pena. 
En las coplas la Pena se hace carne, toma forma humana y se acusa con una línea definida. Es una mujer morena que quiere cazar pájaros con redes de viento. 
Todos los poemas del cante jondo son de un magnífico panteísmo, consultan al aire, a la tierra, al mar, a la luna, a cosas tan sencillas como el romero, la violeta y el pájaro. Todos los objetos exteriores toman una aguda personalidad y llegan a plasmarse hasta tomar parte activa en la acción lírica.

En mitá der «má» 
había una piedra 
y se sentaba mi compañerita 
a contarle sus penas. 

Tan solamente a la Tierra 
le cuento lo que me pasa, 
porque en el mundo no encuentro 
persona e mi confianza. 

Todas las mañanas voy 
a preguntarle al romero 
si el mal de amor tiene cura, 
porque yo me estoy muriendo. 

El andaluz, con un profundo sentido espiritual, entrega a la naturaleza todo su tesoro íntimo con la completa seguridad de que será escuchado. Pero lo que en los poemas del cante jondo se acusa como admirable realidad poética es la extraña materialización del viento, que han conseguido muchas coplas. 
El viento es personaje que sale en los últimos momentos sentimentales, aparece como un gigante preocupado de derribar estrellas y disparar nebulosas, pero en ningún poema popular he visto que 
hable y consuele como en los nuestros. 

Subí a la muralla; 
me respondió el viento 
¿para qué tantos suspiritos 
si ya no hay remedio?

El aire lloró 
al ver las «duquitas» tan grandes 
e mi corazón. 

Yo me enamoré del aire, 
del aire de una mujer, 
como la mujer es aire, 
en el aire me quedé. 

Tengo celos del aire, 
que da en tu cara, 
si el aire fuera hombre 
yo lo matara. 

Yo no le temo a remar, 
que yo remar remaría, 
yo sólo temo al viento 
que sale de tu bahía. 

Es esta una particularidad deliciosa de los poemas; poemas enredados en la hélice inmóvil de la
rosa de los vientos.


miércoles, 8 de mayo de 2013

ENRIQUE MORENTE NO LE TEMÍA A LA MUERTE

Hoy nos despertamos con una noticia triste. 'El fiscal pide que se archive la investigación por la muerte de Enrique Morente'. En su informe, el fiscal afirma que "no ha quedado debidamente acreditada la comisión por parte de ninguno de los imputados de conducta delictiva alguna".
También sostiene que "no puede imputarse a los distintos profesionales médicos que intervinieron en las fases de diagnóstico, tratamiento y cuidado" de Morente "una acción u omisión contraria a las normas de la lex artis (buena práctica médica) que fuese la causante del fallecimiento del paciente".
O sea, que escuchar gritar de dolor a un hombre durante más de dos horas, que la familia pida ayuda a los enfermeros, que estos no sean capaces de ofrecérsela, porque hay órdenes de los médicos de que a ese paciente solo lo trata el Doctor Moreno y esperar a que venga porque supuestamente venía de otra operación (caso que se ha demostrado que es incierto y que estaba durmiendo en casa) no es negligencia. Entonces, ¿que es negligencia? 
En estos casos se demuestra que se ningunea al paciente. La sanidad  y los sanitarios están tan tan tan protegidos que pase lo que pase nunca cumplen condenas por negligencias, salvo alguna excepción puntual y ya se encargan estos de que no trascienda para que la población no se altere y comiencen las demandas. Me gustaría saber si le hubiera pasado lo mismo a un hermano del fiscal. ¿Tomaría las mismas medidas de que se archiven?- O si fuese el hijo de un político. Así nos va. Como siempre se ningunea al ciudadano de a pie. Y lo peor es que con el caso de Enrique la noticia estuvo en la prensa nacional durante mucho tiempo. Algo que no esperaban. De nada ha servido ser un cantaor referente en la cultura no solo flamenca sino española, de nada ha servido ser respetado tanto por políticos (solo algunos) como por directores de cine, actores, empresarios, toreros etc. etc. La muerte se lo llevó. Sin más. 
Se me viene a la mente aquel fandango de Chocolate que tan bien interpretaba:

Yo no le temo a la muerte
porque morir es natural
le temo más a la vida
porque no se donde voy a llegar
con esta cabeza mía

La realidad es que ya no está y que se fue de una manera trágica, sin poder despedirse. Aunque no renunció a nada. Las veces que he coincidido con él, demostró tener un ingenio fuera de lo común. Tenía siempre un capote en la mente y cuando veía que alguien no venía de frente ya le había hecho media verónica. 

Hace ya unos años y a través de un amigo común tuve la oportunidad de ir a su casa a recibir un encargo. Tenía el maestro en mente un proyecto cuánto menos sorprendente, por lo raro del mismo. Quería grabar el mismo cante en todos los soportes que han existido. Es decir, en cilindros de cera, en pizarra, en vinilo en cd y en digital. Creo recordar que me dijo que quería grabar las malagueñas de Chacón.
A través del CAF le llevé a casa cinco cilindros de cera virgen.  Estuvimos charlando un buen rato sobre su proyecto. Tenía en el estudio el fonógrafo para grabar y le pregunté cuando se iba a poner con ello. Me dijo que iba a esperar unos meses porque no encontraba una empresa que fabricara discos de pizarra. A través de un amigo encontré una empresa en Polonia que los hacía y se lo hice saber. Pero por algún motivo no llegó a contactar con esta empresa. Le mencioné si no iba a grabar en amianto, y curiosamente no conocía ese material para grabar. Le puse una grabación de Antonio Mairena en amianto y se sorprendió pues desconocía totalmente ese formato de grabación.
Por desgracia este proyecto quedó sin terminar y nos quedamos sin escuchar a Morente como se escucharía a si mismo D Antonio Chacón antes de 1900 cuando grabó tantos cilindros de cera.
A Enrique se le apareció la muerte cuando menos la necesitaba. Y cuando menos la necesitábamos los aficionados.

Enrique le cantaba a la muerte con cierta frecuencia. Sería un vaticio temprano.  



Si tú no me has de querer
a qué tanto me consientes,
mátame ya de una vez
porque yo prefiero la muerte
a vivir sin tu querer

 Malagueña de Chacón: Se me ha aparecio la muerte

Se me ha aparecio la muerte
cuando pensé de olvidarte
se me ha aparecio la muerte
 como la vida es tan amable
volví de nuevo a quererte




martes, 7 de mayo de 2013

JOSE VALENCIA EN EL TEATRO ALHAMBRA

Ciclo 'Flamenco viene del sur'       Lunes 6/5/2013

Decía el anuncio de neumáticos que la potencia sin control no sirve de nada. Normalmente es así, pero la voz del cantaor lebrijano Jose Valencia rompe este slogan. Es y ha sido cantaor de 'atrás' durante media vida. Es y ha sido cantaor d'alante' durante otra media. Así que su vida es el cante. 
Su conocimiento del cante lo plasma cada vez que abre la boca. Ya sea cantándole a su amigo el bailaor Joaquín Grilo como a 'La Yerbabuena' con la que trabaja actualmente  o la mayoría de bailaores reconocidos del flamenco. La verdad es que en los últimos años no ha parado de trabajar y las compañías se lo rifan. Y no es para menos. Su conocimiento además de sus facultades lo hacen diferente. En no pocas ocasiones he compartido vivencias en festivales franceses con él y siempre se lo digo: 'Eres de los pocos artistas que no sólo estudian cante, sino que estudian la historia del flamenco en su vertiente teórica'. Por lo que hablar con él de flamenco se convierte en placer por partida doble. 
A Granada vino a presentar el que ha sido su primer trabajo discográfico 'Sólo flamenco'. Un título sugerente que reivindica la pérdida de raíz que está sufriendo el flamenco y en este caso el cante. 

Dejando de lado los pensamientos e intereses de algunos y de otros por la industria flamenca la realidad de Jose es el cante. Un cante potente, visceral, poderosamente fuerte y vibrante cuando ataca los tercios álgidos de los cantes. Algunos podrían pensar que en ocasiones parece que grita más que canta, pero ¿no es ese sentimiento de rabia, de dolor, de sufrimiento el que hay en el cante y el que hace que el cantaor exprese sus emociones con esos 'gritos'? La facultad de Jose no solo pasa por poder 'tirar' de garganta y de diafragma para enfrentarse al cante sino de saber colocar la voz en su sitio y de transmitir.
Con la guitarra de Salvador Gutiérrez, que a pesar de conocer y dominar el mástil no tuvo su noche, afrontó cantes por derecho. Arrancó con malagueña de La Trini en la versión del Cojo de Málaga, artista que tanto le gusta y del que también tomó prestada la levantica que haría más tarde para seguir con rondeña, también en la versión del Cojo y finalizar con fandango del Albaicín. 
Los tercios de soleá fueron redondos con aires maireneros y personalizando el cante. Y por levante volvió a recrearse con taranta y levantica del Cojo. 
Otros cantes como las alegrías conjugaron el sabor añejo de su voz con la musicalidad y modernidad del toque de Salvador en contra de los tientos que se volvieron antiguos tanto en cante como en toque. 
Esperábamos oirlo por seguiriyas y así fue. Después de llevar la voz hasta el límite en el resto de cantes, aún le quedaban fuerzas para romperse las vestiduras encarando los cantes de Tío Jose de Paula o rematando con la cabal del Serna, presumiendo de un caudal prodigioso de voz. 
Terminaría por bulerías con aires lebrijanos, ayudados en el compás por Manuel Valencia y Juan Diego Valencia, las mismas del disco, y de regalo un par de fandangos con ecos caracoleros. 
Para todo aquel que guste del cante por derecho le recomiendo que escuche a Jose Valencia. 


lunes, 6 de mayo de 2013

¿MURCIANA O GRANADINAS?

El fandango de Granada que se interpretaba en el siglo XIX procede, como sabemos, del folclore. Una variación de éste derivó en granainas, que llevó a su máxima expresión D Antonio Chacón. En el último tercio del siglo XIX este cante sufrió unas variaciones musicales importantes, gracias a las cuáles conocemos el cante por granainas. Pero antes de Chacón hay que hablar de África Vázquez La Pezeña, quién como ya expusimos en la entrada dedicada a la granaina llevó a los cafés-cantantes de Sevilla y Málaga este cante donde Chacón y tantos otros lo escucharían y lo aprenderían, para más tarde, aportar de su propia cosecha y dar forma al cante por granainas. 
Tomando como válido que fue La Pezeña quien llevó ese cante fuera de tierras granadinas,- ¿Que relación tendría con la murciana? 
¿Tenía la murciana entidad propia como cante?
Está claro que ese cante tal y como lo recogemos de las grabaciones de pizarra no es similar. La Murciana del siglo XIX tenía un aire folclórico heredado de los cantes de fandangos, de los cuáles procede. Eduardo Ocón en su libro 'Cantos Españoles' de 1874 recoge una matriz similar para los modos musicales de murciana y granadina. El autor se abstiene de escribir las melodías por desconocer sus giros.


En la interpretación de la partitura que vemos la música está basada en el 3X4 propio del fandango. 
Así deducimos que cuando este autor habla de murciana y granadina se referirá exclusivamente a la linea melódica del cante dejando claro que la música es exactamente la misma. 
De esta manera está cometiendo un error al catalogar ambos como uno mismo si nos atenemos a la melodía del cante. Por comparación sería como decir que el verdial es lo mismo que la rondeña, la jabera o el jabegote ya que todos llevan el 3X4, pero melodías totalmente diferentes.
Si opta por no transcribir estas murcianas/granadinas ¿es porque no se acercan al fandango?- Aunque él las encuadra en estos. ¿Es posible que cuando habla de murcianas/granadinas se esté refiriendo a lo que hoy conocemos por cantes de levante? Pudiera ser, pues aunque los cantes de levante van libres de compás, el fandango a que se refiere Ocón iba en 3X4. En cualquier caso la música que aporta en su partitura está basada en el 3X4 del fandango, a pesar de no transcribir la melodía.

De ser así, ¿que relación habría entonces entre los cantes de levante y la granadina? Opinen


jueves, 2 de mayo de 2013

HONORES A LUIS SOLER (I)

Sonó mi teléfono y me sorprendí cuando vi quién era. Hacía meses que no hablaba con él a pesar de que teníamos pendiente una o varias citas en su casa. Fue la semana pasada. Mantuvimos una larga conversación en la que me habló de su salud. Por suerte para el flamenco está mejor que bien. Recuerdo que la última vez que fuí a su casa su estado de salud era bastante delicado y mis pensamientos se encaminaban a que la enfermedad iba a más. Me contó ayer que tras un cambio en el tratamiento había mejorado mucho y por  eso no me había llamado antes. Ni yo a él. Ahora es el de siempre. Vivo, feliz, trabajador incansable, amante del flamenco y maestro de tantos. 
Me niego a creer cuando hablo con aficionados, sobre todo los localistas de ciertas zonas de Andalucía y acreedores de que sus comarcas cantaoras son la matriz/cuna del cante o simplemente del flamenco, no hayan seguido a este 'maestro del flamenco' o no hayan aprendido y estudiado sus libros. Lo llamo maestro porque considero que es el mejor adjetivo que lo define. Un maestro es aquel que, principalmente por vocación, enseña. Y por tanto dispone de grandes conocimientos para enseñar. En Jerez la palabra 'maestro' es casi que tabú. Pues este maestro, del que hemos aprendido la mayoría de los aficionados bien puede presumir de que lo es. Aunque su modestia no se lo permita. A pesar de que su intención no sea la de enseñar. Pero la realidad es asi.
Recuerdo cuando comenzó mi andadura periodística y de labor de crítico/cronista flamenco que en ocasiones cuando leía una reseña de cante, el crítico mencionaba que tal o cual cantaor había hecho soleá por el estilo de Serneta 1, luego Paquirri 3 y el remate de Joaquín el de la Paula 3. Aquello parecía una quiniela. Pero ya se advertía que era seguidor de este maestro. Maestros hay muchos pero del que hoy les hablo lo es para la mayoría. La inmensa mayoría.
 Hasta 1992 no se había dedicado un estudio tan minucioso y con tanto rigor de una parte de la flamencología. Por título 'Antonio Mairena en el mundo de la soleá y la seguiriya'. Dos autores. Sobrino y tío. Tio y sobrino. Inmensos aficionados que por su afán de descubrir, de investigar, de aprender acometieron lo que en palabras de un amigo aficionado jerezano sería 'La biblia del cante'. Considero excesiva esta frase por la limitación de este trabajo al cante por soleá y seguiriya pero hasta la fecha ha sido el estudio con más rigor del cante que se ha hecho. 
Recuerdo ahora que hace ya cinco años hablé con una directora editorial para publicar una investigación, y su respuesta fue que 'a pesar de ser un tema de gran interés para el flamenco, iba a ser un libro que no se vendería, por no ser comercial'. Dicho esto me invitó a que escribiera un libro sobre la soleá. Vaya sorpresa. ¡Un libro de la soleá!. Poco, muy poco se puede aportar a este libro. Nuevos datos van saliendo pero con cuentagotas que alteren el contenido del mismo. (por suerte la flamencología y el caracter científico que va adquiriendo hacen que haya cambios. Bienvenidos sean) Les hablo de 'El Libro Verde' que lo llaman los aficionados por tener sus pastas verdes. No me explicaré como siendo esta editora aficionada al flamenco me propone aquella tarea. Porque conocía el libro. ¿Quién no lo conoce en el flamenco?


Me voy de tema... Como decía al principio y tras esta llamada, decidimos concertar una cita. Una cita de amigos. Porque por suerte para mi, es un amigo. Asi que el miércoles 1 de mayo, dia del trabajo, me fui a Málaga, a su casa, a pasar el día. A trabajar. A aprender. A compartir. A disfrutar.
 Mi premisa siempre que nos hemos visto es la misma. No abrir la boca y absorber. Aprender a disfrutar de su palabra, de su sabiduría, de su poesía. Quién me conozca y lea esto pensará que es mi único maestro y que le idolatro. Nada más lejos de la realidad. Idolatro su labor y sobre todo su persona. Su afición. Podré estar o no de acuerdo en algunas de sus afirmaciones y/o convicciones y para ello ya las discuto amigablemente con él cuando nos vemos, pero cuando me comentó en esa llamada la iniciativa de sus amigos me alegré y lo primero que pensé fue: 'tengo que escribirle unas palabras'. 
Reconozco que mis años y mis vivencias en Jerez han influido en mis gustos, pero soy de esos que escucha de todo, sea bueno, o menos bueno. 
Tras llegar a su casa, nos pusimos manos a la obra. Compartir. Compartir palabras, proyectos, música. Su hemeroteca es envidiable. Miles y miles de discos de pizarra,de vinilo, cd, cassettes, directos de festivales, fotos, carteles, poemas, se amontonan con orden preciso en su ordenador, en sus discos duros. Y que los comparta es todo un privilegio. Ayer fui yo el beneficiado pues me llevé a casa una pequeña parte de su discoteca. Queda pendiente volver a vernos y 'pasarle' mis discografía. A pesar de ser amplia, dudo que aporte demasiado a sus 8000 placas de pizarra, sus más de 160 horas de festivales en directo de Mairena, sus miles de cd, cassettes y vinilos etc. etc. Mi discografía se limita a unos miles de discos de cd y a unos cientos de grabaciones en cilindro. Por otro lado es una alegría poder aportar los cilindros que tengo a su extensa discografía. 
Tras pasar el dia en familia, con su mujer Isabeli, (a la que agradezco siempre su amabilidad y su trato) y con su hija Marisa (su hijo Hugo de apenas 5 años me dio un repaso jugando al ajedrez) uno se va con la satisfacción de haber pasado unas horas en casa. Como el estudiante que está en el extranjero y vuelve a casa en el puente.
Un nutrido grupo de aficionados capitaneados por Joaquin Barrera están promoviendo que se le otorgue para el año próximo la Medalla de Andalucía. Y no es para menos.
 Su labor en el campo de la investigación es equiparable (al menos para mi) con la de otros  poetas, literatos, científicos o médicos o músicos. Estamos hablando de cultura y su interés por ampliar y aportar información a la cultura andaluza es digna de elogio. A la música nuestra. 
Para ello han habilitado un blog y un perfil de facebook para que los aficionados se adcriban. Falta hace.  


Tras comernos un buen solomillo en un restaurante cercano, me contó decenas de anécdotas y vivencias de su padrino Pepe Yuste y de su padre. Grandes aficionados al flamenco, que compartieron noches con artistas de la talla de Manuel Torre, Chacón, Niña de los Peines, Cojo de Málaga, Niño Cabra, Centeno... Un lujo escuchar vivencias de primera mano, transmitidas en primera persona por su padre. 
El dia terminó sobre las ocho, hora en la que me marché para casa con la ilusión de volver a vernos en breve. Nuestro amigo común Juan José Téllez lo llamó antes de marcharme para concertar una cita con él al dia siguiente. ¡Su casa es un centro de peregrinación!
Quedó pendiente un café con mi amigo y compañero Jose Manuel Rojas en Málaga. ¡Pa la próxima!
Por otro lado, está en plena presentación de su nuevo libro ' Reflexiones del flamenco y de flamencos'. Un libro repleto de artículos, semblanzas y textos que ha publicado a lo largo de su trayectoria flamenca. Intentaremos traerlo en el mes de junio a Granada, a la Peña a 'La Platería' para que lo presente, por lo que quedan invitados. Les informaré de la fecha.



Para aquellos que no lo conozcan les invito a que busquen referencias de él en internet, que entren en el blog que le han hecho, que visiten su perfil de facebook y a que se aficionen al flamenco. Y por supuesto que voten para que obtenga la Medalla de Andalucía.
Ya la tienen David Bisbal, Alejandro Sanz e Isabel Pantoja (que se la han quitado por ladrona). ¿Que han aportado los dos primeros a Andalucía?
 ¿Que ha aportado nuestro Luis Soler para merecerla?- Las comparaciones son odiosas... Ahi lo dejo...

(continuará...)







ANGUSTIAS CONTRERAS REMACHO EN GRANADA

  El Defensor de Granada, 5 de octubre de 1927. Patria, 19 de abril de 1938. Patria, 8 de octubre de 1938. Patria, 8 de octubre de 1938. Pat...