domingo, 26 de mayo de 2024

CHANO DOMINGUEZ/MARTIRIO. Teatro Alhambra. 23/05/2024.

 Cuando se juntan dos titanes es difícil precisar cuál de los dos nos llevan al cenit, al éxtasis. Chano Domínguez y Martirio se conocieron a principios de los ochenta del siglo pasado, como nos recordó en escena y desde entonces, con y sin continuidad, han conformado y consolidado un duo en el que han sido capaces de reinventar la copla y el bolero regenerando el sonido, la sencillez, la música, la sensibilidad y el equilibrio entre piano y voz. 

El espectáculo se baso en acoplar boleros y abolerar coplas, amén de hacer guiños al flamenco en las distintas piezas musicales del repertorio que presentaron en el teatro Alhambra. Un concierto muy sencillo, muy equilibrado y de gran gusto. No podemos olvidar que Chano Domínguez es, probablemente, el mejor pianista flamenco-jazz que existe hoy día; y Martirio la coplera con más gusto del panorama nacional, capaz de ahondar en el corazón de la copla modernizando, actualizando y renovando el repertorio tradicional andaluz. 

Con todo vendido en el ciclo Andalucía.flamenco, de la Junta de Andalucía, extinto ciclo 'Flamenco viene del sur', la copla superó al flamenco gracias a un repertorio cuidado, entre lo nacional y lo cubano, entre lo folclórico y lo español. Chano Domínguez apareció en escena con prudencia y modestia para deleitarnos con una pieza contemporánea que tuvo guiños flamencos cuando dibuja notas del cante por alegrías. 

Cuando Martirio aparece en escena, el recuerdo inefable a Juanita Reina con la zambra 'Yo soy esa' de Quintero, León y Quiroga nos dio pista para saber que Martirio ensalza las canciones enorme sensibilidad. No necesita elevar su voz, llegar a los altos en los tonos ni maquillajes anodinos. A Rafael de León lo homenajeó asumiendo la personalidad de Concha Piquer con la copla 'No te mires en el rio'. 

Dio paso al recuerdo de Miguel de Molina en nueva canción de regusto y con un acompañamiento brillante en las manos desnudas de Chano que supo dirigir musicalmente a Martirio en un tándem musical perfecto. 

Martirio ha destacado a lo largo de su carrera por acercarse a otras músicas, a otros géneros y extraer de ellos lo mejor de cada uno para consolidar su carrera. De ahí que le conozcamos canciones de Armando Manzanero, Caetano Veloso o Bola de nieve. De este último recodó su obra 'Ay, amor'. Visitó Uruguay y Argentina en el recuerdo a Julio Sosa con la canción 'En esa tarde gris'. Sublime.

Como buena activista social y de los derechos humanos, Martirio quiso romper una lanza en favor de la paz mundial, mentando el horror de guerras como la de Ucrania o Israel. Para ello, recopiló las letras de Rafael Alberti con 'Se equivocó la paloma', una reivindicación literaria en pro de la paz. Entre piezas, Martirio, que no solo tiene una capacidad inmensa para transmitir sino para hablar y provocar risas. 

Finalizó el repertorio de ambos artistazos por bulerías, con guiños en el piano a las fálselas del guitarrista corónense Diego del Gastor, al que se acercó seguramente gracias a la guitarra y al tres cubano de Raúl Rodríguez, hijo de Martirio y colaborador necesario en buena parte de la carrera de su madre. EL cante elegido fue la popular bulería que grabó Manuel Vallejo entre otros y actualmente Ezequiel Benítez y que grabó en disco 'Mucho corazón' la artista onubense. 

Finalizó la noche con un bis con dos canciones muy emotivas que nos dejaron con un sabor de boca amillarado y que deja claro que la música es el mejor arma para llegar al alma. 



viernes, 24 de mayo de 2024

PEDRO EL GRANAÍNO. 'DE GRANÁ. HOMENAJE A MORENTE'. Teatro Alhambra. 23/05/2024.

 Que Pedro el Granaíno siente un amor desmedido por el flamenco no es nuevo. Que lo mismo sucede con su tierra, también. Que sucede igual con Enrique Morente se nota en su dilatada carrera y en la multitud de guiños que le dedica en cada uno de sus recitales. Sin embargo, será prudencia, será el respeto o será la producción de este espectáculo, que Pedro en el recital que ofreció en el teatro Alhambra, producido por Miguel 'El Cheyenne', no quiso encomendarse sin más al Ronco del Albaicín, abusando del acopio de cantes, giros, melismas y estilos para rendir pleitesía al albaicinero. Lo cierto es que en cualquier recital del cantaor hay más guiños a Morente que en el que lleva por título 'De Graná. Homenaje a Morente'. Y fue virtud no abusar del reclamo estilístico y creador de Enrique para ofrecer un espectáculo sencillo y completo que tuvo sus más y sus menos. Los menos lo observamos en los juegos de luces, que no cumplieron siempre con la estética que se pretendió. Lo más, el resto.

Pedro parecía salir al escenario con cierta afonía, aún destacando que su timbre de voz es quebrado, pero o bien fue lo primero o bien tardó en calentar motores porque conforme se iban desarrollando los cantes fue a más hasta que su voz sonó a metal fundido. 

Arrancó su cante con tonás y debla de Tomás Pavón, al que verdaderamente homenajeó a la sombra de Enrique. La vidalita marchenera tuvo en cuenta el origen. Enrique Morente se declaraba admirador aférrimo de Pepe Marchena al que escuchaba en cintas de casette cuando iba de viaje con su familia. De ahí que ambos, tanto Enrique como Pedro, pusiesen en valor la historia de este estilo y la personalidad que ambos imprimieron al mal cante llamado de ida y vuelta. 

Entró a posteriori en terrenos más clásicos afrontando el cante por soleá. Estilos de Joaquín de la Paula, del Mellizo y remate alcalareño junto a la pulcra guitarra de Antonio de Patrocinio se alejaron de las formas morentianas para dar cabida al homenaje a sus referentes cantaores. Y es aquí donde se puede plantear y analizar el fondo y forma del recital. 

El fondo conceptual de la producción de este recital vira hacia 'Lo Morente' no así la forma. ¿Es un acierto no abusar de Enrique? Puede ser. Ya se hace con García Lorca en el flamenco así que dejemos que el río siga su curso, pero sobre todo, cambiar el curso para no provocar inundaciones insípidas. En este análisis también me planteo si la timidez con la que se trató de homenajear a Enrique nos lleva a pensar que se trató de un recital al uso, sin título concreto y menos sin referencias unilaterales. No obstante, el mayor acierto fue no abusar. 

En la forma sí hubo multitud de guiños a Enrique. El comienzo por tonás, en círculo, de pie, en primera línea de escenario, con los palmeros y músicos al compás y el eco profundo arropando la voz de Pedro. Más formas en la elección de cantes, siempre medida y tímida. Finalmente queda rascar no solo en la estética, sino en la ética. En eso Enrique fue un genio. La estética forma parte epidérmica del arte, la ética profundiza en el respeto al arte. 

Pedro, arropado al cajón por 'Benjamín 'El Moreno', a las palmas por 'El Cheyenne', 'José Cortés 'El Indio' y Miguel Heredia (hijo de Pedro) complementaron la escena musical. Cantes por granaínas rematados con el fandango de Antonio Rengel dieron paso al colaborado de lujo: Fernando Rodríguez 'El Pijote' remoquete que nada tiene que ver con el de los hermanos de Camarón de la Isla. A Fernando le acompañó  a la sonanta Miguel Ochando, gran conocedor de la obra de Enrique. Con un sonido metálico de la guitarra Fernando se acordó de Enrique en los fandangos de Huelva (La esposa triste se bañaba) y por soleá se acordó de Fosforito, Mairena con Charamusco y Enrique, probablemente los tres grandes referentes del cante de los últimos cincuenta años. 

Tras Fernando, se incorporó al escenario el grupo completo de músicos para musicar el poema de Al Mutamid, del siglo XII que musicara Morente allá por 1984. A dos voces, tan distintas pero tan bien enjaretadas elevó a los altares el maestro en una de las pocas licencias prestadas para esta noche.

Por seguiriyas se quedaron Pedro y Patrocinio a solas; luz tenue, despistada en el cenital pero secundaria para disfrutar del homenaje a Manuel Torres, Cagancho en la versión de Tomás Pavón y Curro Durse en la versión de Manuel Torres. 

Cerrando el recital por bulerías, Pedro se acordó de Camarón y del Paquiro para unirse la banda completa a la fiesta con una composición made in Pedro el Granaíno y bis por bulerías con pataita del Indio y el cante de Miguel Heredia.


CHANO DOMINGUEZ/MARTIRIO. Teatro Alhambra. 23/05/2024.

 Cuando se juntan dos titanes es difícil precisar cuál de los dos nos llevan al cenit, al éxtasis. Chano Domínguez y Martirio se conocieron ...